Escrito por: ALEJANDRO MARCOS

Cuando uno está aprendiendo a escribir y empieza a tener contacto con el mundo literario, puede verse devorado por una marea de consejos, cursos, recomendaciones y experiencias que hacen complicado saber a qué agarrarte o a quién seguir. Esa sensación se acentúa, además, si eres autodidacta y no entras dentro de ningún taller de escritura.

De entre todas esas técnicas y métodos para aprender a escribir, hoy me gustaría hablaros de los libros sobre teoría literaria. Vamos a repasar las ventajas y desventajas principales de trabajar con estos libros y, además, veremos cuáles son sus diferentes tipos.

Para empezar, diré que a no ser que el libro sea excesivamente malo, no creo que la lectura de la teoría literaria pueda perjudicar a tu carrera como escritor, por lo que casi siempre va a ser recomendable acercarse a este tipo de libros. Lo importante, como siempre, es encontrar el adecuado para nuestros objetivos.

¿Qué es lo que yo entiendo por un libro de teoría literaria? Cualquier libro cuya intención sea transmitir técnicas, experiencias y conocimientos sobre la producción literaria. Esto nos acota un poco el amplio mundo de los libros, pero nos deja aún mucho margen de navegación. Dentro de esa clasificación podemos encontrar manuales, ensayos, propuestas de creatividad y biografías de escritores. Cada uno de estos libros es recomendable, a mi modo de ver, en una fase distinta del aprendizaje y de la carrera del escritor. Vamos a hacer un pequeño recorrido por ellos para ver cuál es el que más puede interesarte en cada momento.

Manuales: Los manuales están pensados principalmente para aquellos que comienzan su andadura como escritores. Suelen ser accesibles y directamente explicar cómo aplicar técnicas o conceptos literarios. Los hay, incluso, con ejercicios para que el lector practique aquello que se ha visto en el libro o en cada capítulo. Son similares en ocasiones a la teoría que se imparte en los talleres de escritura, solo que pierden la parte del feedback del profesor y del alumno, que tan necesaria es para potenciar el aprendizaje en las primeras fases. De todos modos, este tipo de libros es, en mi opinión, un buen punto de arranque. Aquí podemos encontrar algunos como Escribir de Enrique Páez o Escribir cuento de Escuela de Escritores.

Ensayos: Este tipo de libros son recomendables cuando ya se tiene cierta experiencia con la escritura y se ha entrado en contacto con la técnica y la teoría literaria. Por ejemplo, son un buen complemento de lectura a cualquier curso de escritura creativa. Dentro de este epígrafe podemos encontrar libros en los que se habla de la escritura en general, como algo abstracto, y libros en los que el autor o autora nos hablan de su experiencia como escritores. Quizás estos segundos sean más interesantes para el aprendiz de escritor, aunque no hay que rechazar del todo la teoría pura y dura cuando ya se lleva cierto bagaje. Algunos de estos libros que a mí más me han gustado/servido son Zen en el arte de escribir de Ray Bradbury, Mientras escribo, de Spethen King, Contar es escuchar, de Ursula K. Le Guin y La loca de la casa de Rosa Montero. Me han hablado muy bien, aunque aún no los he leído de El gozo de escribir de Natalia Ginzburg y De qué hablo cuando hablo de escribir de Haruki Murakami. En este apartado podemos encontrar unos libros muy concretos que hablan de cómo escribir un género concreto (por ejemplo, los de Agatha Christie y Stephen King) o la historia o análisis del mismo. Recomiendo este tipo de libros a todo aquel que tenga claro que quiere escribir ese género concreto y, quizás, cuando ya se dominen o se controlen someramente las técnicas narrativas. Creo que leerlos antes puede ser contraproducente y provocar que no aprovechemos al cien por cien las enseñanzas que los libros esconden. Conocer la historia del género o sus principales clichés y evoluciones nos ayudará a aportar algo fresco y personal a la historia de dicho género que queremos escribir.

Propuestas de creatividad: Este tipo de libros son recomendables en cualquier fase de aprendizaje ya que son un recurso estupendo para salir del bloqueo y, además, para darnos un pequeño empujón en la escritura. Algunos ejemplos son los Ejercicios de estilo de Raymond Queneau, El cuaderno del reto Bradbury de Bárbara Gil, Escuela de fantasía y Gramática de la fantasía de Giani Rodari y Cien ideas para enfrentarse a la página en blanco de Hugo Camacho. Salvo el segundo, este tipo de libros suele ser de gran ayuda cuando no sepamos qué escribir. Acercarnos al libro y abrirlo por una página al azar puede darnos ideas y chispazos creativos que nos impelan a llenar la página en blanco.

Biografías: Este último tipo de libro es un libro algo más denso que los anteriores (si exceptuamos, por supuesto, los que teorizan acerca de la escritura). Estos libros nos narran la vida de escritores y escritoras. Reconozco que en este tipo de libros ando bastante desinformado porque nunca me han atraído, aunque conozco compañeros escritores que los usan para ver qué métodos de escritura empleaban los grandes clásicos y tratar de adaptarlos a su propio método personal. Por lo tanto, considero que este tipo de libros puede ser recomendable cuando se está buscando un método personal y no se sabe bien por dónde empezar. Copiar a los clásicos siempre es una estupenda idea para empezar. Cuanto menos novelada esté la biografía, más podrá servirte.

Visto lo visto, podemos concluir que, efectivamente, este tipo de libros son recomendables cuando se está aprendiendo a escribir, pero hay que saber bien qué se está eligiendo y, sobre todo, cuándo. Eso sí, considero que siempre que se esté en duda, es mucho mejor acercarse a textos narrativos ya escritos que se adecúen o se acerquen a aquello que queremos escribir. Como he dicho muchas veces, la imitación es un buen modo de aprendizaje y una buena manera de entrar dentro de la historia que queremos escribir. Como calentamiento, leer mientras se escribe un proyecto largo nos puede ayudar y mucho. Quizás los libros de teoría son mucho más recomendables en la segunda parte de la escritura, la de la corrección, que es una parte, en general, mucho más intelectual. De cualquier manera, espero haberos quitado un poco el miedo a este tipo de libros y que hayáis podido encontrar algunas propuestas interesantes en el artículo.