Óscar Cerezo Rodríguez (Madrid, 1978) es autor de las antologías de relatos El mercader de sentimientos (2017) y Hacer el amor con las palabras (2020). Profesionalmente se desempeña como funcionario público en Arganda del Rey, compaginando su trabajo con su formación en la Escuela de Escritores de Madrid.
En 2023 publica Nuca, su novela de fin de Máster, en la editorial Binomio.
Forma parte de la XIII Promoción del Máster de Narrativa.
Lo que opina Óscar sobre el Máster
¿Cómo ha cambiado tu visión de la creación literaria después de haber cursado el máster?
El Máster consigue, casi sin darte cuenta, hacer un recorrido por toda la historia de la literatura, tanto practica, como filosófica y más sesuda. Sus variadas asignaturas engranan unas con otras a medida que realizas trabajos prácticos, lecturas y escritos que consiguen la asimilación de cada concepto. Gracias al Máster he ahondado en la filosofía, la mitología, literatura antigua, contemporánea y nacional. He leído a los grandes y he conocido títulos que de no ser por este curso jamás hubiese llegado a ellos. Estructura, psicología de los personajes, voz narrativa y tiempo verbal, la metáfora como herramienta, lo que se cuenta en segundo plano. Un proceso que, en mi humilde opinión, bloquea temporalmente el instinto del autor y lo centra todo en un armazón creativo lleno de información (vital), normas y estructura. De cada uno depende luego saber mezclar después el instinto con lo aprendido.
¿Crees que se puede enseñar el oficio de escritor?
Sin duda alguna. Se ha creado un sentir general donde cualquier arte creativo se puede y debe aprender (música, pintura, dibujo etc.), excepto la escritura, pues parece ser un don innato que solo unos elegidos poseen, como tocados por la varita del destino. Estoy muy a favor de la enseñanza en el oficio del escritor, al menos las nociones básicas como: presentación del genero, conflicto y deseo del protagonista. Nudo y desenlace, narradores, voz. Lo básico para poder, como poco, estructurar un buen relato
¿Qué es lo que más te gusta del Máster, y de la forma de trabajar de la Escuela?
El máster, tiene una estructura solida y los profesores un gran dominio, no solo de su materia, sino también del conjunto creativo en general. Sin darte cuenta entras en una dinámica de trabajo personal y colectivo de gran superación. El ambiente es inmejorable y mantiene el espíritu familiar que, desde mi punto de vista, la escuela buscó desde el primer momento.
¿Qué ha significado para ti el grupo de compañeros que has conocido en el máster, sigues teniendo relación con ellos?
El grupo es vital e imprescindible. El Máster 20/22 estuvo marcado por la Covid19, por lo que primero tuvimos grupos burbujas de 5 y hacia el final del curso el grupo completo. Hay cosas como: miedos e incertidumbres, lecturas y correcciones, apoyo moral y personal, que no se puede conseguir en los profesores. Los tiempos muertos tras las clases (las cañas) unen y crean piña. No con todo el mundo puedes hablar de proyectos, narradores, estructuras y puntos de giro. El grupo es necesario y es tu familia durante el Máster; grandes amigos una vez terminado.
Resume en tres palabras tu paso por el Máster.
Angustia. Superación y Victoria.
¿Recomendarías el Máster?
¡Siempre! Es una experiencia única dentro del arte literario y la pasión creativa. Todo amante de la escritura debería concederse la oportunidad de algo así.