Licenciada en educación por la Pontificia Universidad Católica de Chile. Posgrado de Especialización en Enseñanza de la Escritura Creativa dictado en conjunto por la Universidad de Alcalá y la Escuela de Escritores. Magíster en Cultura Visual de la Universidad de Nueva York. Diseñadora Teatral de la Universidad de Chile. Con amplia formación y trayectoria nacional e internacional en las disciplinas del arte, diseño, historia y patrimonio cultural.
Imparte talleres de escritura creativa, autobiográfica y terapéutica. Su trayectoria profesional siempre ha estado vinculada con la educación, tanto a través de la investigación, como de la creación e implementación de programas docentes.
Entrevista a la profesora
La escritura es una habilidad que todo ser humano puede adquirir. Debemos entender que las personas nacen con sensibilidades y capacidades diferentes. Hay quienes tienen facilidad para la escritura, pero no por ello se desarrollarán como escritores. La escritura, como todo oficio, se aprende y con una práctica constante se perfecciona. Esta, además, debe nutrirse de la lectura.
Entiendo el rol del profesor como el de un guía, quien con cautela sugiere caminos a seguir para que el estudiante explore sus intereses, desarrolle sus habilidades y encuentre su propio estilo. Una persona que debe estar presente para apoyar y estimular a cada alumno en su búsqueda.
Decidí estudiar educación porque no existe nada más gratificante que ser testigo del desarrollo de las personas en el ámbito que se han propuesto. Es un privilegio poder apoyar y estimular a cada alumno en su crecimiento.
Tengo el respaldo de una buena formación académica y años de experiencia docente, este entrenamiento me ha enseñado sobre la humildad y empatía, la importancia de establecer vínculos respetuosos entre profesor y alumno, y entre ellos. Me ocupa crear un entorno seguro, donde se establezca una relación horizontal que favorezca el diálogo entre las partes que favorezca el proceso creativo. Es importante que las clases se desarrollen con naturalidad, dinamismo y humor.
Es una satisfacción poder aplicar mis criterios pedagógicos con toda libertad.
A los alumnos les pido que anoten el estado de ánimo con el que llegan al curso y sus objetivos generales de lo que quieren lograr en él.
Al final del taller reflexionaremos sobre la experiencia, el aprendizaje logrado y el grado de satisfacción. Como profesora soy exigente, pero flexible, porque entiendo que cada alumno es un mundo diferente que requiere un trato personalizado de acuerdo a sus intereses, capacidades, conocimientos iniciales y disponibilidad para atender los trabajos.
Un clima dinámico, alegre, respetuoso y acogedor, que favorezca la participación de cada estudiante y la interacción entre ellos en beneficio del desarrollo de sus proyectos personales.
Definitivamente. Para que se produzca el fenómeno de enseñanza-aprendizaje, es necesario el intercambio de experiencias y saberes.
Mis alumnos me enseñan y actualizan. Con y a través de ellos aprendo una nueva manera de mirar la vida y de entender la literatura. Les estoy muy agradecida.
Estar vigente, sentir pasión por lo que se enseña, tener dominio sobre el tema, estar abierto a nuevos aprendizajes, tomarse el tiempo para preparar las clases y el material de estudio, saber escuchar para no imponerse sobre terceros. Tener paciencia y sentido del humor para enfrentar cada clase, ser flexible para adaptar el programa del taller a las necesidades del grupo curso en cuestión. Tener buena disposición y ser dinámico en la entrega de contenido.
Me gusta profundizar en los lenguajes subyacentes a la trama, es decir en la atmósfera y el mundo simbólico que la sostiene enriqueciendo el desarrollo de la acción.
Me apasiona la docencia y fácilmente puedo perderme en las correcciones o en la preparación de material de clases. Para administrar mejor el tiempo y compatibilizar la docencia con la creación personal llevo una agenda. En ella reservo los días para cada asunto.
No podría escoger un solo escritor, son muchos los que me gustan. Además, estoy continuamente descubriendo nuevos autores. Pero, si debo escoger algunos: Shakespeare, T.S Elliot, Byung- Chung Han, Jhumpa Lahiri, Birgisson Bergsveinn, Juan Forn, Alejandro Sieveking, Enrique Lihn, Vicente Huidobro entre otros.
En este momento estoy leyendo Cosas pequeñas como esas de Claire Keegan.
